martes, 13 de noviembre de 2012

Entrevista en La Voz del Interior

Daniel Arroyo fue entrevistado por el diario La Voz del Interior en el marco del tercer aniversario de la Asignación Universal por Hijo. Por otra parte, explicó la situación del país en torno a la pobreza.



Daniel Arroyo, el ex viceministro de Desarrollo Social de la gestión presidencial de Néstor Kirchner, y actual titular de la ONG Poder Ciudadano, opinó que para resolver el problema de la pobreza hay que “ir a una segunda generación de políticas, ya que hoy se está respondiendo con más de lo mismo”. Arroyo, quien fue también funcionario del área social del Gobierno de Daniel Scioli, vino a Córdoba a presentar un libro y dialogó con este diario.
–A tres años de la implementación de la Asignación Universal por Hijo (AUH), ¿qué evaluación hace?
–Actualmente, la AUH cubre 3,6 millones de chicos menores de 18 años, cuyos padres son desocupados o trabajan en el mercado informal y ganan menos del mínimo vital y móvil. Viene, de alguna forma, a equiparar el trabajo formal con el informal, como concepto. Son 340 pesos por mes por menor y 16 mil millones de pesos anuales. Tiende a ser universal, porque aún está faltando un sector que tiene trabajo informal y gana un poco más que el salario mínimo, y no entra en el programa, y muchos que están en situación crítica y no hacen el trámite. Para cubrir el conjunto serían cinco millones de menores. La AUH tiene que quedar como una base garantizada en la Argentina y hay que ir reconvirtiendo el resto de los programas sociales.
–¿Y de qué manera habría que reconvertir los demás programas?
–Creo que con el resto de los programas sociales hay que ir a un esquema de empalme. Si una persona consigue trabajo formal y tiene un plan social, debe ir reduciendo el cobro del programa progresivamente. Si no sucede esto, el que tiene un plan social entiende que es permanente y no quiere arriesgarse a otra cosa. Y eso va agudizando el conflicto social.
–¿El Gobierno asegura que la pobreza bajó a menos del siete por ciento? ¿Es así u obedece a los parámetros que da el Indec?
–Hoy las cifras oficiales hablan de 6,7 por ciento de pobreza y 1,7 de indigencia y está claro que no es así. Los montos de valores de alimentos que da el Indec no se compadecen con la realidad inflacionaria. Creemos que la pobreza está cerca del 22 por ciento y la indigencia en el 10 por ciento.
–Entonces, el eje central pasa por bajar la pobreza. ¿Cómo lo haría?
–Hay que ir a una segunda generación de políticas y hoy se está respondiendo con más de lo mismo. Ha mejorado la situación social, pero si hacemos lo mismo de siempre, no vamos a cambiar. Vamos hacia 15 años con la economía para arriba, por lo cual está década que empieza deberíamos resolver el problema de la pobreza y la desocupación. Y hay que hacer otras políticas distintas para conseguirlo.
–¿La pobreza es la causa de mayor inseguridad?
–La desigualdad es la causa de la violencia social. Y también hay un problema de fragmentación: los distintos sectores sociales tienen quebrada su relación. Y eso es realmente grave y complicado para el futuro.