Una ayuda y un incentivo para estudiar
El 80% de los alumnos del colegio Llorens del barrio San Martín (101 chicos) recibe una beca de una entidad bancaria. Cada mes deben administrar ese dinero ellos solos y honrarlo con un buen rendimiento escolar. Un estímulo que resultó exitoso.
Textos: Sandra Conte
Nicolás (14) sabe que con el dinero que le depositan en su cuenta cada mes debe pagar, del 1 al 10, la cuota de seguridad del Centro Educativo Padre José María Llorens y las fotocopias, y después administrar bien sus gastos para agotar su saldo mensual. Pero también que la beca es una distinción, que no todos reciben y que por eso lo alienta a seguir estudiando. Son 101 los alumnos de nivel secundario de este colegio ubicado en el Barrio San Martín que reciben el beneficio que otorga el Banco Francés.
Julieta (17) detalla que para mantener la beca -la tiene desde primer año y está en quinto-, debe alcanzar un buen promedio, no llevarse ninguna materia y ser responsable en las tareas. Y si bien para ella esto no ha resultado difícil, porque le gusta estudiar, conoce que a otros compañeros les han suspendido el beneficio por un mes. De ahí que la chica, que se debate entre seguir estudiando Enfermería o Comunicación Social, entienda que se trata de un premio al esfuerzo.
El banco creó las Becas de Integración en 2007 (ver aparte) y en Mendoza eligió al Centro Educativo Padre José María Llorens por el abordaje personalizado que desarrollan. De los 140 alumnos que el colegio tiene en el nivel secundario, 101 están becados. La directora de la institución, María Frachetti, explicó que los chicos se eligen de acuerdo a la vulnerabilidad familiar, pero también al rendimiento académico, la conducta y el componente socio-afectivo. Destacó que como no es un subsidio, sino que tienen que esforzarse para conservarlo, eleva la autoestima tanto de los jóvenes como de sus familias.
El director de Relaciones Institucionales del Francés, Gonzalo Verdomar Weiss, planteó que los beneficiarios del programa de becas no sólo reciben una ayuda económica de 500 pesos para continuar sus estudios. También tienen que desarrollar habilidades de administración, ya que deben planificar sus gastos del mes de manera de cumplir con sus obligaciones y dejar el saldo en cero (no pueden ahorrar). Además, se convierten en clientes del banco, lo que los obliga a ir a la institución financiera a realizar trámites.
Más allá de que el modelo pedagógico del colegio -que en noviembre cumple 35 años- implica un acompañamiento permanente de los alumnos y sus familias, los becarios tienen tutores que los guían y a quienes les deben presentar la rendición mensual de sus gastos, y asisten a reuniones grupales quincenales.
Ganas de estudiar
Ayer, en el centro educativo, se realizó el Segundo Encuentro de Actores Sociales, del que participaron algunos becarios, padres, representantes del banco, empresarios y la titular de la DGE, María Inés Abrile de Vollmer. El objetivo de la reunión era, además de compartir la experiencia del programa de becas, promover el intercambio de ideas para mejorar a futuro la situación social argentina.
Claudia Barahona, mamá de Magdalena (15), contó que su hija llegó a la escuela del barrio San Martín en 5° grado porque la discriminaban en la anterior y de inmediato recuperó las ganas de asistir a clases. Además de la ayuda económica para la familia, la mujer señaló que confía en que cuando su hija egrese va a saber ser responsable con sus gastos. Y agregó que tiene dos hijos más, de 18 y 20, y que el primero había abandonado sus estudios pero se inscribió en un CENS porque lo incentivó la beca de su hermana.
Daniel Arroyo, quien viajó desde Buenos Aires para participar del encuentro, aportó ciertos datos de la medición de impacto social del programa que hizo su consultora. Así, detalló que sólo 27% de los padres de los alumnos becados terminó la secundaria, mientras sus hijos no sólo la completarán sino que 80% de los chicos entiende que el estudio les da mejores chances en el futuro y planean seguir en un terciario o universidad.
El ex viceministro de Desarrollo Social de la Nación destacó que el modelo de las becas promueve integración pero con calidad, ya que uno de los requerimientos es que los beneficiarios no sólo asistan a la escuela sino que tengan un buen rendimiento.
Casi 7.000 becarios en el país
El Programa de Educación Financiera Becas de Integración BBVA Francés es un programa de becas, de duración anual y renovable, destinado a alumnos de 12 a 19 años que estén cursando la secundaria y pertenezcan a familias de bajos ingresos. Se desarrolla en 12 provincias y en Capital Federal, con 21 organizaciones de la sociedad civil vinculadas a 128 colegios. Hasta la séptima edición -la 2014 es la octava- se otorgó un total de 6.863 becas. Además de los fondos que destina la entidad financiera, también recibe el aporte de donantes. Para conocer más detalles se puede ingresar a la página www.compromisobbvafrances.com.
Nota: Diario Los Andes.
