En diálogo con Radio 2, el ex funcionario e integrante del Frente Renovador sostuvo que " en Argentina, en los últimos 4 años empeoró la situación social" producto de la inflación y de problemas de empleo.
"Hoy la argentina tiene 27 %, o sea 11 millones de personas que no tienen piso de material o que no tienen los servicios básicos. Tiene un millón y medio de jóvenes que ni estudian ni trabajan que es el problema más crítico" agregó remarcando que, actualmente, se registra un 34 % de trabajo informal.
El ex viceministro de Desarrollo Social de la Nación se mostró preocupado con el hecho de que "claramente, el tema de adicciones ha avanzado y, sin duda, es un partido que estamos perdiendo 10 a 0. En primer lugar porque se ha instalado un nuevo sujeto social en argentina que es el que vende droga. Va a un barrio y va a encontrar un, maestro un gasista, y el que vende droga y este gana más que el resto".
Por otro lado, consideró un problema absolutamente serio el hecho de que el tema de las adicciones "no tiene atención en la argentina" y a modo de ejemplo sostuvo: "Una mamá que tiene un chico adicto y que no tiene prepaga ni obra social va a rebotar por todos lados. En todo ese plano estamos muy mal y hay que hacer políticas absolutamente distintas en los próximos años"
Consultado en relación a si el problema consiste en la mala redistribución de los recursos, explicó: "Hay que distinguir el tema social del tema narcotráfico o adicciones. En el tema social el gobierno volcó mucho en recursos, la política social eran 4 mil millones en el 2003, hoy son 102 mil millones. Creo que tiene un mal diagnostico, equivoca la manera de encarar las acciones. Ha llevado adelante políticas para resolver los nuevos problemas de la escuela secundaria , problemas de trabajo, ha tenido decisión para hacerlo pero ha equivocado el camino en el tema social".
Asimismo, señaló: "En materia de narcotráfico el gobierno ha mirado al costado en el tema. Junto con Sergio Masa creemos que lo primero que hay que hacer es crear una fuerza por afuera de la policía para cortar la venta de drogas y después crear 200 centros de atención de adicciones".
En ese contexto, Arroyo sostuvo que es imprescindible que la Justicia cuente con verdaderos instrumentos para hacer frente a estas situaciones pero también que tenga decisión para resolverlas.
"Hoy no solo el problema es la policía sino que en muchos casos por errores de procedimientos por distintas situaciones esta el tema de la puerta giratoria, alguien entra y sale al minuto de la Justicia. El peor problema de la argentina hoy es el narcotráfico y las adicciones", puntualizó.
El licenciado también habló de la situación del norte del país y, específicamente, de Jujuy donde consideró necesario concentrar mucha atención en el tema de las fronteras para combatir el narcotráfico.
"El gobierno no ha tenido voluntad en radarizar, en controlar las fronteras , en evitar algo tan poderoso como es la entrada por distintos modos de producción y de venta de drogas. Acá no ha habido ninguna acción para encarar esto" evaluó y puso especial énfasis en su apreciación respecto de que el gobierno actúa de manera muy rara respecto del tema drogas.
"Estoy absolutamente convencido que todo el noroeste argentino, pero sobre todo Jujuy por el tema de las fronteras y el noreste, requieren de una atención especial en argentina, a través de políticas federales de trabajo directo con el gobierno nacional para resolver el problema de la pobreza que es una pobreza estructural porque es una pobreza intergeneracional", afirmó.
Finalmente, Arroyo dijo que hay que crear una política de descentralización, de mayores recursos a las provincias.