viernes, 10 de febrero de 2012

Anticipo del nuevo libro de Daniel Arroyo

Las cuatro Argentinas será publicado próximamente. Aquí, el prólogo del nuevo libro de Daniel Arroyo.


Nuestro país ha tenido una década de crecimiento económico con tasas cercanas al ocho por ciento anual. Esta situación casi no tiene registro en la historia argentina y nos da la posibilidad de ver a este tiempo como una década ganada, una década en donde el crecimiento económico generó mejoras en las condiciones de vida de los argentinos.
Si durante toda la década del ochenta la Argentina no logró generar crecimiento económico y, si la crisis de 2001 nos encontró con 57 por ciento de pobreza, 28 por ciento de desocupación y 60 por ciento de informalidad laboral, es posible decir que los últimos años iniciaron un proceso de mejoras en términos de inclusión social.
Sin embargo, esta situación no impactó en todos los argentinos de la misma manera. Esta mirada general sobre las mejoras sociales debe complementarse con un análisis más fino acerca de qué ha pasado en los últimos años, cómo cambió la sociedad, qué nuevos conflictos y tensiones se presentan y, principalmente, analizar cuánto repercutió este cambio en los diferentes sectores o clases sociales.
En ese punto es dónde va el objetivo principal de este libro, en no quedarse en el análisis general, sino ahondar en cómo estos procesos fueron modificando la situación social y dieron lugar al surgimiento de nuevas clases sociales con características distintas a las de hace una década.
Los diversos capítulos que aquí se presentan surgen de diferentes artículos académicos publicados, conferencias que he desarrollado en los últimos dos años y notas de opinión en medios periodísticos que dan cuenta del debate sobre cómo mejorar la situación social.
Este libro busca darle continuidad a una obra editada por La Crujía en el año 2009 denominada Políticas sociales. Ideas para un debate necesario en la que se ponía como eje central el debate acerca de qué políticas de reducción de pobreza tenía que encarar nuestro país.
Las cuatro Argentinas parte de la idea de que estamos frente a una nueva estructura social, a otras formas de movilización y organización y, principalmente que nuestro país no tiene una sociedad sino, al menos, cuatro realidades diferentes.
Los modos de vida de los sectores de pobreza estructural, sus redes de relación, sus demandas y sus formas de organización y vínculo con el Estado tienen poco que ver con la dinámica cotidiana que tiene la clase media en Argentina, cuya característica principal es que tener trabajo formal, estar representada en la discusión salarial, contar con obra social y tener, en este contexto, un horizonte de futuro que le permite planificar y proyectar sus consumos.
Diferente a ambas realidades es la que viven los cuentapropistas o aquellos que tienen trabajo informal. Han logrado mejorar su situación en los últimos años pero lo que predomina en sus vidas cotidianas es la precariedad, las dificultades para poder planificar a futuro. Se trata de un sector claramente vulnerable, que indudablemente está mejor que hace una década, pero que no logra dar el salto a la formalización laboral.
Se podría decir que, frente al mundo del trabajo, nuestro país es una sociedad de diferentes velocidades, con unos que trabajan con determinadas condiciones (recibo de sueldo, obra social, jubilación, representación sindical, etc.) y otros que se generan sus ingresos sin tener esas condiciones o que directamente se encuentran en situación de extrema necesidad.
También se diferencia de las otras tres, la realidad de la clase alta en nuestro país. No sólo porque tiene mayores niveles de consumo y de ingreso, sino también porque ha desarrollado una gran capacidad para concentrar capital y diversificar sus fuentes de acumulación económica.
El lector podrá ver en Las cuatro Argentinas cómo nuestro país no es uno sólo, cómo los diferentes sectores sociales (pobreza estructural, sectores vulnerables, clase media y clase alta) tienen dinámicas, modos de vida, relacionamientos con el Estado e intereses diferentes y, en algunos casos, contrapuestos.
Esa idea central recorre todo el libro, tanto cuando se plantea en el capítulo inicial la caracterización de estas cuatro realidades sociales, como cuando se avanza en la descripción del sistema de partidos en Argentina, las formas de organización social, las políticas de inclusión económica y los sistemas de protección social en América Latina.
Pero este libro no intenta quedarse sólo en la descripción, no tiene el objetivo de caracterizar cómo se vive en Argentina, intenta dar un paso más. Aquí se plantean, con la intención de abrir el debate, ideas y caminos con el objetivo de lograr terminar esta década con una sociedad sin pobreza ni exclusión.
La década que viene debería ser la que nos permita generar condiciones sociales y productivas para lograr una sociedad integrada.
Este libro tiene esa finalidad: ayudar a generar condiciones para que, en este contexto económico favorable, logremos dar vuelta definitivamente la situación social. Para que no tengamos “cuatro Argentinas” sino una.
Para que generemos las condiciones para dar oportunidades a nuestros hijos y consolidemos un proceso de movilidad social ascendente que nos permita a todos poder construir nuestro propio futuro.